Historias de un fuerte llamado Federación


Acto religioso por el fallecimiento de Encarnación Ezcurra de Rosas. Carlos Torres, capellán. El general Lucio V. Mansilla gestiona beneficios para la tropa del Federación. Foto: Ilustración del libro "El Fuerte de la Federación" de Heberto Lacentra.


En 1842, el comandante José Seguí estaba a cargo del Fuerte. Fiel al Rosas pidió que se oficiara un funeral por el alma de Encarnación Ezcurra, el que tuvo lugar el 2 de enero. Asistió la tropa en pleno que Seguí hizo formar por este acto y el vecindario vestido con el luto de rigor. En la oportunidad habló el capellán presbítero Carlos Torres.

En julio, el día 31, festividad del patrono San Ignacio, se celebró una misa con sermón y luego un Te-deum "por las gloriosas jornadas de nuestra vanguardia federal". Así denominaba el Comandante Seguí en carta a Rosas, a la victoria de las fuerzas del gobierno nacional sobre Juan Pablo López (hermano del caudillo de Santa Fe Estanislao López y apodado mascarilla, por su fealdad).

En este año la población del fuerte llegaba a 450 habitantes, sin contar la tropa y la oficialidad.

Cuatro años más tarde, en 1846, Federación ya era un puesto militar de importancia. Así lo señalaba el comandante en jefe del Departamento Norte al general Lucio V. Mansilla, diciéndole que el "Fuerte Federación es la llave del departamento" y aconsejándole que se aumentarán las fuerzas.

Por su parte, Mansilla (foto de la derecha) gestionó algunos beneficios para la tropa aquí radicada. En nota enviada al edecán de Rosas decía que "los cueros de consumo de la guarnición de la Federación eran enviados a la Contaduría General". Y ordenaba al Comandante Seguí que suprimiera esos envíos y se provea con el producto de los cueros, de los artículos de vicio. "Y que sea distribuído en adelante, con igualdad a todos los benémeritos federales que guarnecen aquel punto".

Las fuerzas del Fuerte, en 1850, estaban compuestas por un comandante, dos ayudantes, dos tenientes primeros, tres alféreces, un portaestandarte, tres sargentos primeros, nueve cabos primeros, diez cabos segundo y 130 soldados. Además se contaba con 11 capitanejos amigos que comandaban 78 soldados.

En ese tiempo el fuerte dependía del jefe de la frontera norte, coronel José María Cortina, con asiento en Rojas. Esa dependencia era solamente en caso de invasión de indios.

______________________________ADHESION 191 AÑOS DE JUNIN______________________






























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